En el mes de febrero una comisión del Instituto Nacional de Migración (INM RD) realizó una visita a las instalaciones de la Compagnie de Développement Industriel, S. A. (CODEVI por sus siglas en francés). En el lugar se pudo observar la dinámica laboral de este parque, que se distingue por ocupar tanto territorio dominicano como haitiano.
Del lado dominicano se encuentra Villas CODEVI, un complejo habitacional que brinda hospedaje a empleados de las posiciones gerenciales y, de igual forma, está disponible para alquiler por el público general. El lado haitiano, que ocupa la mayor parte del complejo, contiene las naves industriales de las diferentes empresas y opera en la modalidad de zona franca. El Sr. Rafael Domínguez, director de CODEVI, explicó que, en términos generales, esta compañía se rige por las normas del Gobierno haitiano, con excepción de los asuntos que atañen a la parte que se encuentra en suelo dominicano donde imperan las leyes establecidas por el Gobierno dominicano.
CODEVI es una iniciativa que fomenta el desarrollo fronterizo, ya que aporta empleos a las poblaciones asentadas en ambos lados de la línea divisoria entre Haití y República Dominicana. Cuenta con aproximadamente 15 mil trabajadores, de los cuales el 85% es de nacionalidad haitiana, mientras que el restante 15% es predominantemente dominicano. Junto a las nacionalidades mencionadas, hay allí empleados de Bangladesh, Brasil, Canadá, Estados Unidos, India, Nueva Zelanda y otros países, lo que supone una institución con una marcada diversidad cultural.
Es importante recalcar que el dinamismo económico que CODEVI genera no solo se circunscribe a la instalación de la zona franca, sino también al efecto multiplicador que pudiera tener sobre la economía de la zona. Así lo expresó el Sr. Domínguez, quien afirma que parte de los pagos que se hacen a los nacionales haitianos se convierten en consumos en el mercado binacional, lo que se traduce en ingresos para productores dominicanos.
Durante la visita el equipo del INM RD accedió a las instalaciones de la empresa Hanes donde se manufacturan productos textiles, como camisetas y ropa interior. El encargado explicó que las piezas que se ensamblan en la planta utilizan cortes de tela importados desde la zona franca de Bonao en República Dominicana. Es importante tener presente que la zona franca del complejo CODEVI está en territorio haitiano y, por tanto, los productos dominicanos ingresan en forma de importación. Una vez ensambladas, las piezas de ropa son reimportadas a República Dominicana, como mercancía en tránsito, para ser exportadas desde el Puerto de Manzanillo hacia Estados Unidos u otros destinos. El tour se completó con una visita a la estación de radio y televisión y la estancia infantil. Esta última acoge niños de tres meses a cinco años, quienes reciben instrucción de acuerdo con el currículo educativo de Haití.
Definitivamente, CODEVI es un modelo industrial innovador en la región. Es un ejemplo de iniciativa orientada al desarrollo de la zona fronteriza a través de la creación de empleos directos e indirectos, al tiempo que propicia un ambiente culturalmente diverso que tiende puentes entre ambos países.
Reyna Bartolomé y Pedro Valdez
Analistas del Departamento de Investigación
y Estudios Migratorios (DIEM)